(dpa) – Algunos granjeros vietnamitas inflan los cuerpos de cocodrilos y serpientes y luego los desuellan vivos para vender luego las pieles alrededor del mundo, según reveló una investigación de la organización Personas por el Trato Ético de Animales (PETA, por sus siglas en inglés).
«PETA ha descubierto una granja de serpientes en Vietnam que abastece de piel de serpiente para su uso en la industria mundial de cuero y somete a las serpientes a una crueldad horrible», declaró Nirali Shah, un portavoz de la organización defensora de animales.
Este maltrato incluye «el sellado de sus bocas y anos con bandas elásticas para luego inflarlas con un compresor de aire, causando un sufrimiento extremo a sus cuerpos, aplastando sus corazones y causando un estrés severo a los sistemas circulatorios y nerviosos», detalló Shah a la Agencia Alemana de Prensa (dpa).
Un vídeo difundido por PETA muestra a un trabajador parado sobre el cuerpo inflado de una pitón. En otra imagen, una de las colas de los animales aún se movía.
Las serpientes son criadas dentro de pequeñas jaulas, sin cuidado veterinario, y el personal de la granja no controla los signos vitales de los reptiles antes de desollarlos y destriparlos.
De acuerdo a esta información, una sola granja puede matar hasta unas 2.000 pitones al año para usar sus pieles en la producción de productos de cuero como bolsos o carteras que se venden en todo el mundo.
Un informe del Centro de Comercio Internacional de 2016 registró 486 granjas de pitones en Vietnam. La misma publicación sugirió que el inflado de las serpientes era una práctica común en esta nación del Sudeste Asiático.
Otro vídeo de PETA publicado recientemente muestra a un granjero tratando de aturdir cocodrilos electrocutándolos con una batería eléctrica, antes de apuñalar a los animales en la cabeza. Luego infla a los reptiles para desollarlos más fácilmente. Algunos aún se mueven mientras son desollados.
Vietnam ha sido criticado durante los últimos años por cómo trata a serpientes y cocodrilos.
PETA acusó en 2016 a la marca de productos de lujo Moët Hennessy Louis Vuitton, también conocida como LVMH, de abastecerse de cueros de cocodrilos provenientes de granjas vietnamitas, denunciadas por presunto maltrato de reptiles.
LVMH declaró posteriormente que su marca Louis Vuitton suspendió todo el comercio con las granjas vietnamitas criticadas por la agrupación defensora de los derechos de los animales.
En 2014, la organización Animals Asia reveló públicamente la existencia de una «aldea de serpientes» en las afueras de Hanoi, donde los turistas ávidos de emociones bebían la sangre de serpientes y luego se comían los corazones aún latiendo de los animales.
Según la entidad, esta práctica pone en riesgo las poblaciones salvajes de especies de serpientes en peligro de extinción.
Por Chris Humphrey (dpa)