Fráncfort, 28 dic (dpa) – El piloto alemán Sebastian Vettel reconoció que echa de menos el papel pionero de la Fórmula 1 en el área de la técnica y la tecnología.
«Solo a partir de 2022 será obligatorio utilizar un 10 por ciento de biocombustible de segunda generación en la Fórmula 1», expresó Vettel en una entrevista que publicó hoy el periódico alemán «Frankfurter Allgemeine Zeitung».
«Así como están hoy las cosas, la proporción solo aumentará a apenas un 30 por ciento cuando se cuente con un nuevo reglamento sobre motores. Y eso sería, como muy temprano, a partir de 2025, 2026. Me parece muy, muy decepcionante», declaró el cuádruple campeón mundial.
El piloto, de 33 años, corrió a mediados de diciembre su última carrera al mando de una Ferrari, en el cierre del ciclo de seis años en el equipo italiano. A partir de la próxima temporada conducirá para la nueva escudería Aston Martin.
«No tenemos ningún control de tracción, ningún sistema antibloqueo ni sistema de estabilidad, con los que ya cuentan hoy todos los coches nuevos que circulan por las calles. Son cosas que fueron desarrolladas en la pista», subrayó Vettel.
«En el área de seguridad hemos hecho grandes avances, sin lugar a dudas», completó.
El piloto consideró que para el año 2025 habrá «seguramente estaciones de servicio para cada uno que quiera vender combustible producido en un cien por ciento con energías renovables. «¿Dónde quedó el papel pionero de la Fórmula 1 en el terreno de la tecnología?», cuestionó.
Según su opinión, la política del poder juega allí un papel porque nadie renunciar a sus ventajas. «Así parece ser. La Fórmula 1 siempre ha costado mucho dinero. Y la competencia y la ambición siempre han conseguido hasta ahora que se abrieran suficientes billeteras», aseveró el piloto.
Vettel advirtió que no se llega a entender la gravedad de la situación: «Me parece frustrante». «Lo sabemos y aún así no hacemos nada. Así es como sellamos nuestra desaparición en la irrelevancia», declaró.