Vox ha perdido el grupo municipal que tenía en el Ayuntamiento de Salamanca después de haber conseguido tres concejales en las elecciones municipales de 2023. Es la consecuencia administrativa de la crisis interna generada en las últimas semanas entre los propios compañeros de formación.
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El cabeza de lista de Vox en los últimos comicios, Ignacio Rivas, fue destituido por sus otros dos concejales electos, Alejandro Pérez de la Sota y María Carpio, mediante una votación interna.
Un informe de la Secretaría Municipal del Ayuntamiento de Salamanca sancionado, posteriormente, mediante resolución de Alcaldía llegó este lunes a las partes con la resolución, según confirmaron a Ical fuentes municipales.
De este modo, Rivas se queda como único representante reconocido por Vox, pero pasa al Grupo Mixto al no sumar ningún otro apoyo; y Pérez de la Sota y Carpio, ya sin siglas, se quedan como concejales no adscritos.
Por lo tanto, Vox, que había logrado tres concejales en las últimas elecciones municipales, a pesar de seguir con dichas actas vigentes, debe renunciar a los dos asesores a los que, como grupo municipal, tenía derecho. De esta manera, la consecuencia más plausible de la crisis interna es el despido de Juan Ramón Gallego y Fonsi Castellanos, que ejercían sendas asesorías en las labores municipales.
Durante una comparecencia pública, Alejandro Pérez de la Sota y María Carpio insinuaron que Rivas había permitido el “uso indebido” de fondos del grupo y le acusaron de falta de transparencia interna. Sería la causa mayor por la que habrían tomado esta decisión aunque, posteriormente, también realizaron declaraciones contra la Ejecutiva provincial y criticaron el supuesto auspicio de Madrid a estas prácticas, además de defender públicamente a los procuradores expulsados a nivel autonómico, Javier Teira y Ana Rosa Hernando.