Londres/Colonia (Alemania), 17 mar (dpa) – El músico británico Roger Waters, cofundador de la banda Pink Floyd, anunció hoy acciones legales contra las cancelaciones de sus conciertos en las ciudades alemanas de Múnich y Fráncfort, donde las autoridades locales le acusan de antisemitista.
«Mis abogados están tomando medidas para asegurar que mis conciertos en Múnich y Fráncfort en mayo de 2023 tengan lugar como se acordó contractualmente», dijo el músico, según un comunicado difundido por su agencia de representación.
Waters, de 79 años, defendió la necesidad de protegerse de «las acciones inconstitucionales de dos autoridades» y declaró no ser antisemita.
Está previsto que el ayuntamiento de Múnich vote el 22 de marzo a favor de la cancelación del concierto del británico en la ciudad. De la misma forma, también las autoridades de Fráncfort cancelarán el evento.
Los críticos acusan a Waters de apoyar la campaña BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones), que pide el boicot al Estado de Israel y sus bienes por su política con Palestina.
«Mis opiniones habituales se refieren exclusivamente a las políticas y acciones del Gobierno israelí y no al pueblo de Israel», explicó el músico en el comunicado de hoy. «El antisemitismo es aborrecible y racista, y lo condeno sin reservas igual que condeno todas las formas de racismo», agregó.
El músico denunció asimismo sentir coartada su libertad de expresión: «Por eso doy este paso para garantizar que la voluntad de unos pocos no me impida actuar en Fráncfort y Múnich».