Jerusalén, 20 feb (dpa) – El ministro alemán de Justicia, Marco Buschmann, rindió homenaje hoy a las víctimas del Holocausto en el memorial Yad Vashem de Jerusalén.
«Desde la tierra de los perpetradores, soy hoy un invitado que se inclina ante las víctimas», escribió Bushmann en el libro de visitas. Cada vida extinguida aquí grita al mundo ‘Nunca más'», agregó.
Previamente, en la Sala del Recuerdo, el ministro depositó una corona de flores en memoria de los seis millones de judíos asesinados por la Alemania nazi.
Buschmann llegó hoy a Israel para una visita de dos días. Es la primera visita de un ministro alemán desde la toma de posesión del nuevo gobierno israelí a finales del año pasado.
«Con ningún otro Estado estamos tan comprometidos. Con ningún otro Estado estamos tan en deuda», escribió Buschmann en su cuenta de Twitter.
«Con mi viaje, me gustaría aportar mi contribución: para reconciliarnos con la historia alemana, para ampliar nuestra asociación, para fortalecer el Estado de derecho y la democracia liberal», agregó.
Por la tarde, el ministro prevé inaugurar una exposición itinerante en Tel Aviv sobre la revisión del pasado nazi del Ministerio de Justicia.
El martes, la agenda del ministro incluye una reunión con su homólogo israelí, Jariv Levin. Además, están previstas conversaciones con el fiscal general israelí, Gali Baharav-Miara, y con la presidenta del Tribunal Supremo, Esther Chajut.
La visita de Buschmann coincide con las protestas que desde hace semanas llevan a cabo decenas de miles de personas contra el debilitamiento del poder judicial planeado por el Gobierno israelí.
Según la propuesta gubernamental, el Parlamento podría anular las decisiones del Tribunal Supremo con mayoría simple y se daría más influencia a los políticos en el nombramiento de jueces.
Los críticos consideran que las medidas anunciadas amenazan la separación democrática de poderes. El presidente Isaac Herzog advirtió de un colapso constitucional y social de Israel. El Gobierno israelí -el más derechista en la historia del país- sostiene, por otra parte, que el Tribunal Supremo ejerce actualmente demasiada influencia política.