Berlín, 9 abr (dpa) – El ministro alemán de Economía, Peter Altmaier, se mostró a favor de prolongar hasta fin de año la ayuda estatal a empresas afectadas por la crisis relacionada con el coronavirus, según señaló hoy en Berlín.
Altmaier agregó que ya se está conversando al respecto en el seno del Gobierno. En un principio, el apoyo financiero para paliar los efectos económicos de las restricciones está limitado hasta mediados de 2021.
El ministro reclamó medidas más duras para romper la tercera ola de contagios en Alemania, advirtiendo que la situación es peor de lo que muchos quieren admitir y apuntó en especial hacia el sector de los cuidados intensivos en los hospitales.
Sin embargo, Altmaier consideró que no es necesario cerrar los establecimientos manufactureros e industriales, dados los progresos observados en la oferta de pruebas de coronavirus que hacen las empresas. Agregó que se trata de evitar «un cierre permanente durante meses».
Opinó que es posible aumentar en un tercio las capacidades de hacer test a las plantillas y añadió que espera que esto sea implementado de forma voluntaria.
Un sondeo entre empleados realizado por encargo del Gobierno alemán indicó que el 61 por ciento trabajaba para una empresa que ofrece pruebas de coronavirus. Altmaier recalcó que el objetivo es que esta cuota sea del 90 por ciento.
El empresariado alemán está en contra de una obligación de realizar pruebas. Un portavoz del Ministerio de Trabajo criticó ayer jueves que, desde el punto de vista de esa cartera, «no es satisfactorio que casi el 40 por ciento de los empleados» no pueda hacerse test en el ámbito laboral.
Agregó que el ministro de Trabajo, Hubertus Heil, ha dejado en claro en repetidas ocasiones que está a favor de una regulación obligatoria si no se hacen suficientes pruebas en las empresas.