Kiev, 22 ago (dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, apostó hoy durante su visita oficial en Kiev por la celebración de una nueva cumbre sobre el conflicto ruso-ucraniano.
«En mi opinión, esto nos haría progresar», dijo Merkel en una reunión con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. La canciller abogó por que a la cumbre asistiesen los jefes de Estado de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania, es decir, el denominado «Formato de Normandía».
En una rueda de prensa conjunta con el presidente ucraniano, Merkel dijo que el historial de intentos de resolver el conflicto en el este del país no era satisfactorio. Sin embargo, puntualizó que el plan de paz había traído la calma aunque esa paz no es ni permanente ni sostenible.
Merkel señaló que el intercambio (de prisoneros) entre Rusia y la región separatista no se ha materializado.
Por su parte, el presidente ucraniano pidió más presión sobre Rusia para pacificar la región y agradeció el apoyo de Merkel. Tanto Alemania como Francia llevan varios años mediando en el conflicto.
«Agradecemos a la parte alemana que haya adoptado una postura firme y apoye nuestra soberanía», dijo Zelenski, y pidió la aplicación de las decisiones de la cumbre sobre Ucrania en París celebrada en diciembre de 2019.
Estaba prevista una cumbre de seguimiento en Berlín en 2020 que finalmente no se celebró. Merkel indicó hoy que tanto Zelenski como ella están preparados para ello. La canciller elogió además a Ucrania por sus esfuerzos de reforma.
Desde hace más de siete años, las tropas gubernamentales ucranianas luchan contra los separatistas apoyados por Rusia en las regiones de Donetsk y Lugansk, a lo largo de la frontera con Rusia. Según las estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), más de 13.000 personas han muerto en el conflicto.