Düsseldorf (Alemania), 16 ago (dpa) – Las familias con bajos ingresos son las que más sufren con el aumento de la inflación en Alemania, señala un estudio publicado hoy por el Instituto de Macroeconomía e Investigaciones de Coyuntura (IMK).
El informe indica que, mientras que la cesta de la compra para el conjunto de los hogares alemanes aumentó un 7,5 por ciento interanual en julio, las familias con bajos ingresos tuvieron que pagar hasta un 8,4 por ciento más por sus compras típicas.
El instituto IMK de la Fundación Hans Böckler, cercana a los sindicatos, detalló en su análisis mensual de la inflación que los solteros con ingresos elevados fueron los menos afectados por la subida de precios. Su coste de la vida aumentó un 6,4 por ciento.
Según el IMK, el hecho de que los hogares con bajos ingresos se vean especialmente afectados por la inflación se debe a que los principales factores de precios actuales -la energía y los alimentos- desempeñan un papel especialmente importante en sus gastos.
«Si la inflación recibe un impulso adicional en un futuro próximo, debido a que pronto expiran el billete reducido para el transporte público y el descuento en el combustible y al mismo tiempo entra en vigencia el recargo a la factura del gas, es probable que la brecha social en cuanto a los gastos se amplíe aún más», advierten los expertos del IMK.
El instituto añadió que esto se debe a que los aumentos adicionales de los precios de la energía en los hogares tendrán un impacto particularmente fuerte en las familias con menores ingresos.
Los expertos indicaron que las rebajas tributarias propuestas por el Ministerio de Finanzas no aliviarán el desequilibrio social.
«Porque esto proporcionaría poca o ninguna ayuda precisamente a las personas que, según los resultados de nuestra investigación, están especialmente agobiadas», explicaron.
Según el director del IMK, Sebastian Dullien, para evitar un desequilibrio social en los próximos meses sería más adecuada otra tarifa plana de energía para todos los hogares, así como un tope de precio para un consumo básico de gas.