(dpa) – La electrónica siempre se ha mantenido lejos de la bañera, pero parece que esa regla no se aplica si uno se mete en una de las bañeras más caras del mundo, que cuenta con luces ambientales, vapor integrado y funciones de hogar inteligente.
A lo largo de los siglos los diseños de las bañeras apenas han cambiado, pero la visión del fabricante de electrodomésticos de cocina y baño Kohler muestra que la conectividad inteligente podría estandarizarse en las próximas décadas.
La bañera «Stillness», cuyo precio a la venta figura entre los 6.198 y los 15.988 dólares (entre 5.143 y 13.269 euros) en su versión más cara, está conectada a un asistente digital para que uno pueda ordenar que se llene sola mientras va en coche a casa desde el trabajo, por ejemplo.
Presentada en la feria tecnológica CES de este año, la bañera parece que vaya a desbordarse, pero todo forma parte del diseño sin bordes que resultará familiar a cualquiera que haya nadado en una piscina infinita.
Para crear ambiente, la bañera inteligente cuenta con luces incorporadas y aparato para generar vapor.
¿Y por qué el nombre? «Stillness» (quietud) alude no solo a la supuesta experiencia de calma cuando uno se da un baño, sino al hecho de que la bañera se llena silenciosamente desde el fondo, a diferencia de los grifos tradicionales fijados en la pared, que suelen ser ruidosos.
Kohler es conocida por sus diseños de electrodomésticos un tanto singulares, y anteriormente presentó un cabezal de ducha inteligente con su propio altavoz y un asistente inteligente incorporado.
Entre otros, ya cuenta con el grifo de alta tecnología «Sensate» que responde a la voz, para que se pueda abrir en modo manos libres o se le pueda ordenar que vierta una cantidad exacta de agua para una receta.