Múnich, 15 may (dpa) – Unos 10.000 aficionados del Bayern Múnich se unieron en un cántico en la Marienplatz de la capital bávara durante la celebración del título de la Bundesliga, y corearon «Lewa, quédate; Lewa, quédate» en respuesta a las informaciones que sitúan al goleador polaco fuera del club.
El sábado, tanto el Bayern como Lewandowski confirmaron que el jugador no renovaría el contrato, que expira en 2023, mientras directivos del club exigen que lo cumpla.
El presidente, Herbert Hainer, insistió hoy en que Lewandowski cumpla su contrato. «Tiene contrato con nosotros hasta el 30 de junio de 2023, y jugará con nosotros durante todo ese tiempo», dijo Hainer.
Sin embargo, el dirigente no descartó categóricamente la salida de Lewandowski este verano europeo. «Puede ser que ambas partes estén de acuerdo», indicó, pero subrayó que tendrían que «estar de acuerdo».
El presidente de la junta directiva, Oliver Kahn, se mostró firme en la televisión bávara durante la celebración del campeonato en el Ayuntamiento de Múnich: «Este contrato será cumplido. ¡Basta!».
El directivo se manifestó tranquilo. «Todo este alboroto, todo este alarmismo, lo conocemos del pasado», subrayó. «No nos da dolor de cabeza», agregó.
Reveló que al representante de Lewandowski, Pini Zahavi, le habían hecho recientemente una oferta para prolongar el contrato del jugador más allá de 2023, que había sido «rechazado».
«Eso también es su derecho», reconoció Kahn, quien confirmó indirectamente que se trataba de una oferta de prórroga de un año, igual que la firmada por el delantero Thomas Müller y la que se espera que firme también el capitán, Manuel Neuer.
Tras el último partido de la temporada, en el campo del Wolfsburgo, Lewandowski habló de su situación. «Claro, todavía me queda un año de contrato», dijo.
Pero reveló lo que le había dicho al director deportivo, Hasan Salihamidzic: «Si llega una oferta, entonces tenemos que pensar en ella, también por el club».
Ambas partes tienen que pensar en el futuro», explicó: «Tenemos que esperar y ver qué pasa».
Sin embargo, en esta situación, miles de aficionados reclamaron que se quede. Ante ellos, desde el balcón del Ayuntamiento muniqués no habló de su futuro.
«Hemos echado de menos estar aquí con vosotros. El décimo campeonato (consecutivo) de la liga alemana es ya una historia legendaria. También es para ustedes lo que conseguimos», dijo, dándose una palmadita en el pecho, cerca del corazón. Luego gritó por el micrófono el lema del Bayern, «Mia san mia».
Para el entrenador Julian Nagelsmann fue el estreno en el balcón tras ganar el título de campeón de liga por primera vez. «Me gustaría celebrar más títulos con ustedes el año que viene. Esperemos que el año próximo haya uno o dos títulos más», dio esperanzas a los aficionados, todavía sin saber si será con o sin Lewandowski.
Esta temporada, la de debut de Nagelsmann en el banquillo, se vio empañada por la eliminación en la Copa Alemana, en la segunda ronda por el Borussia Mönchengladbach, y en la Liga de Campeones, en cuartos de final por el Villarreal.
Por otro lado, Müller se mostró esperanzado de que su compañero continúe en el club: «Vamos a ver qué pasa. Tiene contrato hasta 2023. Eso significa que el Bayern tiene la palabra. Claro que queremos que se quede. Pero, por supuesto, todos conocemos el negocio…».
Y destacó la profesionalidad del polaco: «Lewy es un profesional de primera. Cuando estás en el campo como jugador, y especialmente como delantero, quieres rendir».
Pero aunque el club insiste en que no estará en venta este verano europeo, Lewandowski reclamó que hay que tenerlo en cuenta si se presenta una oferta en medio del supuesto interés del Barcelona.
Lewandowski lleva en Múnich desde 2014 tras cuatro campañas en el Borussia Dortmund, el máximo rival dentro del fútbol alemán. En esos años ha ganado todos los títulos a nivel de club, incluido el triplete (Liga, Copa y Liga de Campeones) de 2020 con el Bayern, y 10 Bundesligas en total con ambos clubes.
Hace un año superó el récord goleador de Gerd Müller en una temporada, con 41 goles, y ha sido el máximo cañonero en siete campañas, incluyendo las últimas cinco. Es el segundo máximo goleador de la historia de la Bundesliga, con 312 tantos, solo superado por el propio Müller, con 375.
Por Klaus Bergmann y John Bagratuni (dpa)