Berlín, 21 jun (dpa) – El Gobierno alemán se opondrá a la prohibición de la venta de coches nuevos con combustión interna a partir del 2035, acordada por el Parlamento de la Unión Europea (UE) hace dos semanas, según dijo hoy el Ministro de Finanzas, Christian Lindner.
En un acto celebrado en Berlín con motivo del Día de la Industria, Lindner defendió que los motores de este tipo deben seguir desarrollándose en Europa y Alemania ante el hecho de que la electromovilidad no podrá implementarse en muchas regiones del mundo durante las próximas décadas.
Una prohibición en la UE, argumentó, supondría que los fabricantes germanos y europeos detendrían su trabajo sobre los motores de combustión interna.
«Por lo tanto, he decidido que yo en el Gobierno federal, que nosotros en el Gobierno federal, no estaremos de acuerdo con esta legislación europea», declaró el ministro. Explicó que la tecnología abierta es una parte esencial de la economía de mercado.
Previamente, el ministro de Transportes, Volker Wissing, y el propio Lindner, ambos liberales, rechazaron la decisión tomada por el Parlamento Europeo, que aún debe ser negociada con los países miembros de la UE.
En cambio, representantes de Los Verdes y del Partido Socialdemócrata, los otros socios en la coalición del Gobierno alemán, apoyaron la postura de los eurodiputados, por lo que queda abierto el debate de cómo votará Alemania dentro de la UE.