Berlín, 1 may (dpa) – Los sindicatos alemanes alertaron hoy de las cargas adicionales que sufren los trabajadores por la pandemia y llamaron a una mayor solidaridad e inversiones para paliar los efectos de la crisis.
«No permitiremos que los empresarios abusen de la pandemia como excusa para recortar puestos de trabajo, deslocalizar y hacer dumping salarial», dijo el jefe de la Federación Alemana de Sindicatos (DGB), Reiner Hoffmann, en la manifestación central del Día del Trabajador en Hamburgo.
El sindicalista sostuvo que el coronavirus tampoco debe ser una excusa para la falta de dinero en la transformación hacia una economía digital y neutra desde el punto de vista de las emisiones de carbono. Advirtió que forjar el futuro no significa ahorrar dinero, sino invertir y volver a invertir.
Debido a las restricciones que rigen en todo el país, la DGB, al igual que el año anterior, convocó actos más pequeños bajo el lema «La solidaridad es el futuro». También organizó un programa con discursos, debates y música disponible en Internet.
La canciller Angela Merkel rindió homenaje al esfuerzo de muchos trabajadores en condiciones difíciles por la pandemia de coronavirus y pidió que se aprovechen las oportunidades de hacer test de coronavirus para trabajar en un entorno seguro.
«Son precisamente las profesiones que de otro modo no reciben tanta atención las que han mantenido al país en pie», destacó en su videomensaje semanal con motivo del Día del Trabajador.
Sin los empleados de los supermercados y la gente al volante de los camiones, «no podríamos contar con el suministro de alimentos al que estamos acostumbrados», aseguró la mandataria.
A poco menos de cinco meses de las elecciones generales, los candidatos a canciller de las conservadoras CDU/CSU, los Verdes y el Partido Socialdemócrata también se pronunciaron a favor de mejores condiciones para los empleados.
En un mitin en Düsseldorf, el primer ministro de Renania del Norte-Westfalia y líder de la CDU, Armin Laschet, pidió más reconocimiento para las profesiones socialmente relevantes como la enfermería. «Los que tienen un empleo precario, los que están en los trabajos mal pagados, son en parte los que más trabajan».
La candidata a canciller por el Partido Verde, Annalena Baerbock, demandó salarios y condiciones de trabajo razonables. «No basta con aplaudir a los cuidadores. No basta con dar las gracias como político y volver a las andadas cuando todo el mundo esté vacunado».
El vicecanciller y candidato socialdemócrata, Olaf Scholz, exigió aprender lecciones de la pandemia. «Las cosas no pueden seguir como están», dijo, refiriéndose a la jornada reducida, los despidos y la desigualdad salarial. Scholz pidió más convenios colectivos y mejores controles.
El líder de la DGB, Hoffmann, destacó que la acción solidaria había logrado evitar lo peor de la crisis del coronavirus. Según sus palabras, los sindicatos, los comités de empresa y los consejos de personal han luchado para amortiguar las dificultades sociales y asegurar muchos puestos de trabajo.
El máximo dirigente del sindicato de empleados públicos y de servicios Verdi, Frank Werneke, constató que muchos sectores de la asistencia sanitaria y los servicios sociales están decepcionados por la inacción del gobierno federal. «Esperamos mejoras concretas, y las esperamos en esta legislatura».