Berlín, 16 mar (dpa) – La jueza alemana Birgit Malsack-Winkemann, detenida durante una redada contra el grupo ultraderechista «Ciudadanos del Reich» (Reichsbürger), no podrá seguir ejerciendo por el momento su cargo, según decidió hoy el Tribunal Administrativo de Berlín.
Además, la jurista verá reducido su salario mensual en un 50 por ciento, informó una portavoz. El tribunal siguió así una solicitud presentada por el Departamento de Justicia, Diversidad y contra la Discriminación del Gobierno regional de Berlín.
La jueza puede presentar un recurso contra el procedimiento disciplinario en el plazo de dos semanas.
Según el estado actual de la investigación, el tribunal parte de la base de que el procedimiento disciplinario incoado conducirá a que Malsack-Winkemann no pueda seguir ejerciendo su cargo con carácter permanente.
«Esto se debe a que una jueza que se une a una alianza secreta destinada a llevar a cabo un golpe de Estado violento rompe el juramento que ha prestado a la Ley Fundamental (Constitución) de una manera especialmente grave y, por lo tanto, debe ser destituida», dice el comunicado del tribunal administrativo.
La presunción de inocencia no impide al tribunal tener en cuenta las conclusiones del proceso penal, que aún no ha concluido.
Malsack-Winkemann fue detenida en diciembre pasado durante la redada a gran escala realizada contra los «Reichsbürger» en Alemania y se encuentra en prisión preventiva. La sospechosa ocupó un escaño en el Bundestag (Parlamento Federal) por el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) de 2017 a 2021, y volvió a la judicatura en marzo de 2022.
Los «Reichsbürger» no reconocen la República Federal ni sus estructuras democráticas. La Fiscalía Federal acusa a una veintena de los detenidos de pertenecer a una organización terrorista que quería derrocar el sistema político en Alemania.