Duisburgo, 1 may (dpa) – La compañía alemana de correos lleva semanas sin entregar cartas en un barrio de Duisburgo por temor a que sus carteros se infecten con coronavirus porque los vecinos no acatan las reglas de higiene.
Una portavoz de la empresa estatal Deutsche Post dijo hoy a dpa que la situación para los repartidores ya no era tolerable debido al comportamiento de muchos residentes, la mayoría de los cuales no llevaban mascarillas.
La calle sin salida del barrio de Rheinhausen, en esta ciudad del oeste alemán, está repleta de bloques de apartamentos. Desde el comienzo de la pandemia de coronavirus, los camiones de reparto han sido rodeados por los residentes una y otra vez.
La portavoz Britta Töllner informó que los trabajadores de correos no han querido salir del vehículo y se han sentido acosados por la escasa distancia que guardan los vecinos y por la falta de mascarillas.
Aunque no hubo agresiones, dijo, sí se produjeron situaciones aisladas de ataques verbales.
Para proteger a sus empleados, el correo ha suspendido el reparto directo a domicilio. La portavoz precisó que desde febrero la gente puede recoger sus cartas y su correo en una sucursal vecina.
La empresa señaló que el año pasado ya se intentó promover más seguridad y el cumplimiento de las medidas de protección contra el coronavirus con la ayuda de intérpretes y asistentes sociales en el barrio.
Sin embargo, hasta ahora el efecto de las intervenciones no ha sido suficiente como para que los repartidores vuelvan a las calles, argumentó Töllner. «En primer lugar hay que garantizar de forma duradera que no corran peligro».