Wolfsburgo (Alemania), 9 ene (dpa) – El presidente del comité de empresa de Volkswagen, Bernd Osterloh, solo apoyará objetivos de costes más estrictos si la junta directiva también aborda una mayor racionalización interna del grupo, según declaraciones a dpa.
La reducción de costes vendría provocada por la presión por la crisis derivada de la pandemia, la transformación del sector y una creciente competencia de Tesla.
«Con tal proliferación, de repente ya no nos sirven de mucho nuestro tamaño (de empresa) y capacidad de escala», señaló, en referencia al gran número de variantes de células de batería utilizadas para los coches eléctricos, por ejemplo. Volkswagen tiene actualmente unas dos docenas de versiones diferentes más que su competidor estadounidense.
«Para los clientes, lo único que importa es el resultado, es decir, un alcance máximo con un consumo óptimo y una buena capacidad de carga», dijo Osterloh.
La «disposición de las celdas de baterías individuales ocultas en el vehículo» debe ser más estandarizada «para poder aprovechar plenamente nuestras ventajas como grupo», acotó el máximo representante de los empleados, que también forma parte de la junta de supervisión de Volkswagen.
«Ofertas especiales y diversidad de extras por parte de las marcas deben pasar a ser cosa del pasado», opinó.
El fabricante germano de automóviles con sede en Wolfsburgo lleva tiempo buscando nuevas posibilidades de ahorrar costes, pero el comité de empresa también exige a los directivos que estudien la posibilidad de reducir la variedad de equipamientos y optimizar los procesos, en lugar de aumentar la carga del personal.
Osterloh rechaza mayores presiones o recortes de personal: «Eso se hace cuando no se sabe qué más hacer y se busca una recuperación en el mercado de valores». En 2020 se produjeron nuevos enfrentamientos entre el comité de empresa y la junta directiva debido a la presión y a problemas técnicos en la producción del modelo Golf.