Berlín, 24 jun (dpa) – La ministra alemana de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, y su colega estadounidense Anthony Blinken coincidieron hoy en Berlín en iniciar una acción conjunta contra la crisis del hambre internacional derivada de la guerra en Ucrania.
«Nuestro mensaje al G7 es claro. No permitiremos que la guerra de agresión rusa sumerja al mundo en el hambre. Actuaremos en forma conjunta», dijo Baerbock hoy en Berlín, tras reunirse con Blinken en el marco de una conferencia internacional de seguridad alimentaria.
La conferencia, de la que participan 50 países, fue convocada por Alemania a dos días de la cumbre del G7 en Elmau, en Baviera.
Baerbock acusó a Rusia de hacer estallar adrede los precios de los alimentos «con su cínica guerra de los cereales para desestabilizar países enteros».
Blinken agradeció por su parte a Alemania su liderazgo en este asunto. «La única razón para esto ahora es la agresión de Rusia contra Ucrania y el bloqueo de Rusia al trigo y otros alimentos que se exportan desde Ucrania», dijo el secretario de Estado.
«Estamos unidos en la defensa de los valores comunes. Estamos unidos en la defensa de los derechos humanos y la democracia y el derecho internacional», expresó Blinken.
Baerbock había realizado antes del inicio de la conferencia un llamamiento a la comunidad internacional para que luche de manera decidida contra el agravamiento de la crisis del hambre en el mundo.
«Este año se necesitan más de 44.000 millones de euros (46.400 millones de dólares), de los que solo se ha financiado la mitad», dijo, en referencia a los requerimientos de ayuda alimentaria internacional.
Baerbock calificó la situación como muy dramática, con unos 345 millones de mujeres, niños y hombres amenazados por la escasez de alimentos en todo el mundo. «Es una crisis de hambre que se acumula ante nosotros como una ola que amenaza la vida», comentó.
Algunas de las razones, explicó, no son nuevas y pueden remontarse al cambio climático y a las consecuencias de la pandemia de coronavirus.
«Pero fue la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania la que convirtió una ola en un tsunami», opinó Baerbock. «Rusia está utilizando deliberadamente el hambre como arma de guerra y está convirtiendo al mundo entero en rehén», detalló.
La ministra alemana de Desarrollo, Svenja Schulze, explicó a su vez que alrededor de 400 millones de personas en todo el mundo se abastecen normalmente de alimentos procedentes de Ucrania. Agregó que en muchos países, estos suministros han desaparecido y aún más países están sufriendo los altos precios del mercado mundial como resultado de la guerra en Ucrania.
Schulze anunció que el Gobierno alemán invertirá este año un total de unos 4.000 millones de euros para luchar contra el hambre en todo el mundo.