Colonia, 28 dic (dpa) – Tras el masivo derrumbe económico que generó la crisis de coronavirus, la mayoría de los rubros de la economía alemana recuperó la confianza y prevé un crecimiento en 2021, según el sondeo del Instituto de Economía Alemana (IW) difundido hoy.
De acuerdo a la encuesta, 26 de los 43 sectores analizados esperan registrar el año próximo una mayor actividad económica que en 2020.
La entidad aclaró que para una serie de empresas y rubros económicos, las perspectivas optimistas para 2021 no significan sin embargo una recuperación tal que permita regresar a los niveles previos a la crisis.
El sondeo sostiene que 21 sectores de la economía alemana prevén que el año próximo generarán una producción ligeramente mayor. Entre los rubros que esperan poder dejar atrás el año de la crisis se encuentran el de construcción de maquinaria, la industria electrónica y la industria química.
«La industria es el caballo de tiro para salir de la crisis económica», destacó el director del IW, Michael Hüther.
«La condición es, sin embargo, que las fronteras se mantengan abiertas, no se corten las cadenas de distribución y los niños puedan asistir a las guarderías infantiles y las escuelas para que los empleados puedan acudir a sus puestos de trabajo», precisó.
El sector hotelero, el comercio minorista así como el rubro de la organización de congresos y ferias y el de la publicidad esperan un crecimiento moderado luego de la crisis que vivieron en 2020, en el que algunos de estos negocios registraron una interrupción casi total.
La industria automotriz, como también importantes proveedores, prevén un aumento notable del nivel de producción.
«Las brutales caídas en 2020 relativizan no obstante estas expectativas positivas», puntualiza el informe del IW.
En total, cinco sectores prevén un marcado aumento de la producción en 2021 respecto al año anterior. En cambio, unos 13 rubros económicos estiman que el nivel de producción que tendrán en 2021 será incluso menor que el del año de la crisis.
La industria textil y de la moda, así como la industria alimentaria, por ejemplo, esperan un nivel significativamente más bajo.
El sector de la construcción prevé en tanto una contracción más moderada. La construcción pudo salir hasta el momento bastante bien parada de la crisis, pero según el instituto, padece cada vez más las consecuencias del debilitamiento general del nivel de inversión y de los perjuicios que sufrió la producción a causa de la pandemia.