Wiesbaden (Alemania), 24 ago (dpa) – Alemania registró en el primer semestre de 2021 el segundo mayor déficit presupuestario desde la reunificación en 1990 debido a los gastos y las ayudas multimillonarias destinadas a paliar los efectos de la pandemia de coronavirus.
Según cifras suministradas hoy por la Oficina Federal de Estadística (Destatis), el gobierno federal, las regiones, los municipios y las cajas de seguridad social gastaron en total 80.900 millones de euros (94.900 millones de dólares) más de lo que ingresaron.
En relación con la producción económica total, el déficit fue del 4,7 por ciento. Fue el segundo mayor déficit en un primer semestre desde la reunificación. En el primer semestre de 2020, el déficit fue de 47.800 millones de euros.
La economía alemana recuperó el ritmo en el segundo trimestre tras la paralización de la vida pública por la pandemia a principios de año. El producto interior bruto (PIB) aumentó un 1,6 por ciento en el periodo de abril a junio en comparación con el trimestre anterior.
En una primera estimación, la agencia estatal había previsto un crecimiento del 1,5 por ciento. Sin embargo, en comparación con el cuarto trimestre de 2019, el trimestre anterior al inicio de la crisis del coronavirus, la producción económica siguió siendo un 3,3 por ciento inferior.
La propensión de los habitantes al consumo tras el fin de las mayores restricciones y el gasto gubernamental fueron los principales factores que impulsaron la economía. Las medidas para combatir el coronavirus han sido suavizadas gradualmente desde mayo.
En 2020, el Estado alemán reportó un déficit por primera vez desde 2011, tanto en los primeros seis meses como en el conjunto del año.
Según el Bundesbank, el déficit podría aumentar a pesar del fuerte crecimiento económico previsto para el conjunto del año y probablemente supere el cinco por ciento del PIB (año anterior: 4,5 por ciento).
A causa de la crisis derivada de la pandemia, los Estados de la Unión Europea suspendieron por primera vez las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, según las cuales el déficit presupuestario no puede superar el 3 por ciento y la deuda total no puede exceder el 60% del producto interior bruto.