Berlín, 16 mar (dpa) – El canciller alemán, Olaf Scholz, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reafirmaron su intención de ampliar la cooperación armamentística entre ambos países, tras una reunión celebrada hoy en Berlín.
Scholz destacó la firme intención de Alemania de adquirir el sistema israelí de defensa antiaérea Arrow 3 y calificó el proyecto de compra de «paso adelante muy, muy grande» en la cooperación.
Asimismo, agregó que está claro que Alemania «seguirá suministrando armas a Israel». En el pasado, Alemania entregó principalmente submarinos a Israel e incentivó las exportaciones con dinero de los contribuyentes. El trasfondo es que Alemania declaró la seguridad de Israel como una razón de Estado debido al asesinato de seis millones de judíos en tiempos de la Alemania nazi.
El sistema israelí Arrow 3 formará parte de un sistema europeo de defensa antiaérea. Actualmente constituye el nivel más alto de la defensa antimisiles de varios niveles de Israel y puede destruir sistemas de armas ofensivas a una altura de 100 kilómetros.
Ni Scholz ni Netanyahu quisieron responder sobre cuándo se firmaría un contrato y cuál sería el alcance del acuerdo. «Hemos decidido el camino a seguir. Por supuesto, avanzaremos lo más rápidamente posible», se limitó a decir Netanyahu.
Por otro lado, Scholz expresó hoy su preocupación por la polémica reforma judicial que planea el Gobierno de Israel en una rueda de prensa conjunta con Netanyahu en Berlín.
«Como socios en valores democráticos y buenos amigos de Israel, seguimos este debate muy de cerca y, no lo voy a ocultar, con gran preocupación», señaló.
«Nuestro deseo es que nuestro socio en valores, Israel, siga siendo una democracia liberal», subrayó. El canciller dijo esperar que «aún no se haya dicho la última palabra» sobre la propuesta del presidente israelí, Isaac Herzog, quien recientemente formuló una alternativa a la polémica reforma.
El gobierno religioso de derechas de Netanyahu quiere acelerar la controvertida reforma para finales de mes. El objetivo es debilitar deliberadamente el poder judicial independiente. Los críticos ven en ello una amenaza a la separación de poderes como pilar de la democracia. Por ello, desde hace más de dos meses se suceden en Israel fuertes protestas.
Herzog había publicado el miércoles un plan que, a su juicio, debería reforzar simultáneamente al Parlamento y al Gobierno y garantizar un poder judicial independiente. Netanyahu rechazó la propuesta y la calificó de «desequilibrada» antes de partir hacia Alemania.
En Berlín, el primer ministro israelí rechazó las afirmaciones de que la reforma debilitaría al poder judicial. «Israel es una democracia liberal y seguiremos siéndolo», subrayó, y agregó que un poder judicial independiente no es un poder judicial todopoderoso.
«Haremos lo que sea necesario para corregir el desequilibrio», dijo Netanyahu, y agregó que lo harán mediante la reforma prevista. «No nos desviaremos ni un milímetro de ella», añadió.
Con anterioridad a la rueda de prensa, Scholz y Netanyahu visitaron en la capital alemana el monumento conmemorativo Andén 17 (Gleis 17), en memoria a las víctimas del Holocausto.
Desde el andén 17 de la estación de tren de Grunewald, en Berlín, unos 10.000 judíos fueron conducidos en trenes a los campos de trabajo, concentración y exterminio nazis en 1941 y 1942.