Berlín, 10 abr (dpa) – El Gobierno alemán aseguró que ampliará su compromiso de política de desarrollo en la región del Sahel, a pesar de la anunciada retirada de sus efectivos militares desplegados bajo el paraguas de la ONU en Malí.
«No podemos quedarnos de brazos cruzados y ver cómo el terrorismo sigue extendiéndose sin control en el Sahel», declaró la ministra de Desarrollo, Svenja Schulze, a los periódicos del grupo Funke.
«Muchas personas se unen a los extremistas porque necesitan un trabajo y no ven otras perspectivas. Aquí es donde puede entrar la política de desarrollo, eliminando el caldo de cultivo de los grupos terroristas», dijo la ministra.
Schulze advirtió que Occidente no debe abandonar a países como Malí y Burkina Faso y afirmó que Alemania seguirá comprometida en la región del Sahel.
«Incluso ampliaremos nuestro compromiso en política de desarrollo y nos centraremos en toda la región, incluidos los Estados costeros. Porque los terroristas no respetan las fronteras nacionales», señaló Schulze.
La ministra de Desarrollo agregó que Alemania tiene su propio interés en apoyar a los países. Si los «espacios sin Estado» se extendieran por África, explicó, esto también podría plantear crecientes desafíos a Europa.
Los Estados de Malí y Burkina Faso, en África Occidental, están siendo acosados por grupos terroristas islamistas. En ambos países han tomado el poder gobiernos militares opuestos a la antigua potencia colonial Francia y otros socios occidentales.
En Malí, más de 1.100 hombres y mujeres de la Bundeswehr, las Fuerzas Armadas alemanas, siguen desplegados actualmente como cascos azules de la misión Minusma de las Naciones Unidas. Sin embargo, el Gobierno alemán quiere retirarlos antes de mayo de 2024. La junta de Gobierno en Malí se considera cercana a Rusia.