Berlín, 19 dic (dpa) – El Ministerio alemán de Finanzas informó hoy que la Unidad de Inteligencia Financiera (FIU, por sus siglas en inglés) acumula 100.000 informes de actividades sospechosas de blanqueo de capitales sin tramitar.
Según el ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, los casos se han ido acumulando a lo largo de los meses, entre otras cosas, por un cambio en la legislación, que dio lugar a nuevas obligaciones de información y a un número significativamente mayor de informes.
La semana pasada, el director de la FIU, Christof Schulte, dimitió de su cargo «por motivos personales». El director del departamento, Tilman Peters, dirige ahora la entidad de forma interina.
Lindner quiere establecer una nueva estructura en la lucha contra el blanqueo de dinero en torno a tres pilares, de los cuales destaca la creación de una Oficina Federal de Policía Criminal Financiera encargada de investigar los casos complejos de flujos financieros ilegales.
Anteriormente, el ministro había explicado que la idea es que los investigadores no detecten solo el delito cometido, sino que sigan el rastro del dinero obtenido en el mismo.
El segundo pilar es la existente FIU, y el tercero una oficina de coordinación para la supervisión del llamado sector no financiero, que incluirá por ejemplo al sector inmobiliario y la industria del juego. Hasta el momento, dicho sector ha estado vigilado por más de 300 autoridades cuya labor pasará a estar centralizada.
Por su parte, el sindicato fiscal DSTG instó a acelerar la reorganización.
«Es necesaria una tríada de personal altamente cualificado, una excelente infraestructura informática y los correspondientes poderes de toma de decisiones», indicó el presidente del DSTG, Florian Köbler, en declaraciones al diario económico «Handelsblatt».
Añadió que cada año se blanquean en Alemania unos 100.000 millones de euros (unos 106.000 millones de dólares). «No se puede permitir que esto continúe», señaló.