Hamburgo, 26 dic (dpa) – El 53 por ciento de los alemanes espera el año próximo con optimismo pese a la pandemia del coronavirus, según un sondeo realizado por el futurólogo germano Horst Opaschowski.
Hace un año, en una encuesta similar llevada a cabo por el Instituto Opaschowski para Investigación del Futuro (OIZ), el 56 por ciento había dicho lo mismo con vistas a 2021.
En el sondeo actual, el optimismo está menos extendido entre los ciudadanos del este de Alemania, donde solamente el 50 por ciento se manifiesta confiado, frente al 54 por ciento de los alemanes occidentales.
En tanto, únicamente el 43 por ciento de los alemanes orientales está de acuerdo con la afirmación de que el año que viene será mejor que el que termina. En la parte occidental, el 57 por ciento comparte esta opinión.
Con respecto al nuevo Gobierno federal, las expectativas de los ciudadanos del este también son significativamente menores que las de los alemanes del oeste.
Solo el 39 por ciento de los habitantes de los estados federados orientales se expresó de acuerdo con la afirmación: «tengo grandes esperanzas en el nuevo gobierno» del canciller Olaf Scholz, frente al 55 por ciento de los occidentales.
Opaschowski realizó la encuesta a mediados de noviembre en colaboración con el instituto de estudios de opinión Ipsos.
A principios de diciembre, el Instituto Allensbach para la Investigación de la Opinión Pública presentó un estudio según el cual la «generación intermedia» había recuperado lentamente su confianza.
En la encuesta encargada por la Asociación Alemana de Seguros (GDV), el 37 por ciento de los entrevistados de entre 30 y 59 años se mostró de nuevo optimista sobre el futuro. Esta cifra está lejos del nivel anterior a la pandemia del coronavirus, pero es significativamente mayor que el 22 por ciento del año pasado.
«En contraste con las palabras de Merkel ‘podemos hacerlo’, la actitud de los alemanes en este momento es ‘queremos esto'», señaló Opaschowski. El futurólogo resaltó que esta actitud ante la vida está desplazando al pesimismo.
Sin embargo, la gente también mira el futuro con preocupación. El 85 por ciento teme un aumento en la brecha entre ricos y pobres. En 2019, antes de la pandemia, solo el 60 por ciento de los encuestados había expresado esta opinión. El sondeo también revela que 80 por ciento cree que cada vez habrá menos viviendas asequibles. En 2019, solo el 46 por ciento era de esta opinión.
Según Opaschowski, la gente ve más problemas cuando las preguntas se refieren a la sociedad en su conjunto. Si bien se manifiestan preocupados, probablemente la mayoría no se ve afectada directamente por esta situación.
Según la encuesta, una clara mayoría del 70 por ciento está dispuesta a aceptar restricciones temporales si esto hace más seguro el futuro de la próxima generación.
Al respecto, Opaschowski analiza que las personas desean un nuevo contrato entre las generaciones. «Esto significa: queremos estar más unidos y también estamos dispuestos a hacer sacrificios para ello».
En cuanto a la lucha contra el cambio climático, el sondeo revela que el Gobierno debe presentar un plan concreto para seguir paso a paso.
Sin embargo, también señalan mayoritariamente que los medios para alcanzar el objetivo deben ser proporcionados. Por lo tanto, se insiste en que la movilidad no puede restringirse de forma permanente.
Es una necesidad humana básica y un derecho fundamental. «El deseo de viajar es la forma más popular de felicidad», opina el futurólogo germano.