Kassel (Alemania), 26 sep (dpa) – Unas 738.000 personas visitaron la exposición de arte contemporáneo documenta 15, que finalizó el domingo en la ciudad alemana de Kassel, informaron hoy los organizadores en un primer balance de la muestra envuelta en repetidas acusaciones de antisemitismo.
«Haber llegado a un número de visitantes que solo es un 17 por ciento inferior a las cifras de la documenta 14 de 2017 es, a mis ojos, un éxito de planificación y ejecución en tiempos de pandemia y de los consiguientes descensos de visitantes de larga distancia y grupales», señaló el director de la documenta, Alexander Farenholtz.
La documenta, que se realiza en Kassel desde 1955, se celebra cada cinco años. Junto con la Bienal de Venecia es la muestra más importante de arte contemporáneo.
La decimoquinta edición se vio envuelta en una polémica por acusaciones de antisemitismo. Ya en su inicio se alzaron las primeras voces que acusaban al director artístico de la muestra, el colectivo artístico indonesio Ruangrupa, de supuesta cercanía con el movimiento de boicot antiisraelí BDS.
Poco después de la inauguración, a mediados de junio, se descubrió que un enorme cartel tenía motivos antisemitas, por lo que fue desmontado. Posteriormente aparecieron nuevas obras que desataron fuertes críticas. Como consecuencia del escándalo, renunció la directora general de la muestra, Sabine Schormann.
La documenta de este año representaba al Sur Global, centrando la atención no en la obra, sino en el arte como proceso colectivo. En tanto, la documenta 14 en 2017 había convocado a 891.500 personas.