Wiesbaden (Alemania), 30 ago (dpa) – La tasa de inflación en Alemania volvió a subir en agosto tras dos meses consecutivos de descenso y se situó en el 7,9 por ciento interanual, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis) basándose en datos provisionales.
En julio de 2022, la tasa de inflación había sido del 7,5 por ciento y en junio del 7,6 por ciento. Por su parte, en mayo la tasa interanual fue del 7,9 por ciento.
La subida de los precios de la energía, en particular, tuvo un «impacto sustancial en la elevada tasa de inflación», señaló Destatis.
Detalló que los precios de la energía fueron un 35,6 por ciento más altos en agosto de 2022 que en el mismo mes del año anterior. Los precios de los alimentos también aumentaron por encima de la media, un 16,6 por ciento más.
En referencia a las políticas del Gobierno para amortiguar el efecto de la inflación en los consumidores, Destatis señaló: «El impacto del abono (de transporte público) de nueve euros y el descuento en el combustible están incluidos en los resultados».
Sin embargo, «todavía no es posible, sobre la base de los resultados provisionales, mostrar el alcance exacto de estos efectos», agregó Destatis.
Ambas medidas expiran a finales de mes, lo que significa que el transporte público y el combustible se encarecerán, lo que probablemente traerá consigo nuevos aumentos de la inflación en la mayor economía de Europa.
El Bundesbank (banco central alemán) prevé que la tasa de inflación medida por el denomimado índice de precios al consumo armonizado (IPCA) alcance el 10 por ciento en otoño (europeo).
Según datos preliminares, la cifra armonizada en agosto en Alemania fue del 8,8 por ciento.