Berlín, 24 dic (dpa) – Alemania, junto a Francia, Gran Bretaña y otros países, acusó al gobierno de Malí de introducir mercenarios de la empresa rusa Wagner, afirmando que la medida socava el proceso de paz en el país africano.
«Nosotros, los socios internacionales comprometidos con el apoyo a Malí y a su pueblo en sus esfuerzos por lograr una paz y estabilidad sostenibles y combatir el terrorismo, condenamos firmemente el despliegue de tropas mercenarias en territorio maliense», dice un comunicado conjunto de 16 países, publicado por el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán.
Alemania tiene desplegados unos 1.350 militares en Malí dentro de la misión de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas MINUSMA y de la EUTM (Misión de Entrenamiento de la Unión Europea en Malí).
«Lamentamos profundamente la elección de las autoridades de transición malienses de utilizar los ya escasos fondos públicos para pagar a mercenarios extranjeros en lugar de apoyar a las Fuerzas Armadas de Malí y a los servicios públicos en beneficio del pueblo maliense», señala la declaración.
Los países firmantes dijeron estar al tanto de la participación del gobierno ruso en el apoyo material al despliegue del Wagner Group en Malí. Pidieron a Rusia que «vuelva a tener un comportamiento responsable y constructivo en la región».
La declaración fue suscrita también por Canadá, Italia, España, Noruega y Suecia, entre otros países. El Gobierno de Malí no reaccionó hasta ahora ante la misma.
La sospecha de que los mercenarios rusos estaban activos en Malí causó una amplia preocupación entre los líderes de Europa en septiembre, y varios de ellos pidieron una revisión o el fin de las misiones allí.
«Consideramos errónea la decisión de los responsables en Malí de introducir mercenarios en el país y la lamentamos expresamente», dijo la ministra alemana de Defensa, Christine Lambrecht, en un tuit.
Lambrecht agregó que esto no ayuda a mejorar la seguridad en Malí y se comprometió a coordinar estrechamente con los socios internacionales el curso de acción futuro y el compromiso en el país. «La seguridad de nuestros militares tiene la máxima prioridad», subrayó.
Francia, antigua potencia colonial en Malí, está luchando contra los grupos terroristas islamistas en la vasta región del Sahel con la Operación Barkhane. Actualmente hay desplegados unos 5.100 soldados franceses. Los atentados son frecuentes y a menudo están vinculados a grupos islamistas extremistas.
Malí ha experimentado una inestabilidad política sostenida, con tres golpes militares desde 2012. El actual gobierno militar de transición tomó el poder en mayo.
Los mandatos parlamentarios que autorizaron por un año el despliegue militar alemán en Malí fueron emitidos en la última primavera europea. La nueva coalición de Gobierno de socialdemócratas, verdes y liberales acordó revisar todas las acciones militares alemanas en el exterior.