Hamburg/Berlín, 10 nov (dpa) – El virólogo alemán Christian Drosten declaró hoy que la pandemia del coronavirus provocará un invierno muy duro y que no descarta que se implementen restricciones de contacto social.
«En este momento estamos atravesando una verdadera situación de emergencia», dijo el jefe de Virología del hospital Charité de Berlín con respecto a la situación de las unidades de cuidados intensivos. «Tenemos que hacer algo ya mismo», resaltó en declaraciones efectuadas en el podcast de la emisora NDR «Das Coronavirus Update».
«Probablemente tengamos que volver a controlar la actividad infecciosa ahora a través de medidas de contacto. Y esto no sucederá probablemente, sino seguramente», destacó, aunque al mismo tiempo admitió que podría ser difícil jurídicamente hacer cumplir medidas generales amplias.
«Se podría optar por las vacunas de refuerzo en lugar de restricciones de contacto. Yo creo que es una buena medida, aunque esto no ocurrirá tan rápido», advirtió.
Según el virólogo, en primer lugar hay que vacunar a las personas de más edad con un refuerzo (booster) y luego inocular a los más jóvenes con la tercera dosis como «un salvavidas de protección contra la transmisión».
«A largo plazo, el objetivo ideal debe ser tener una población triplemente vacunada», destacó.
Según Drosten, la normativa 3G, que permite el acceso a determinados recintos solo a vacunados, recuperados de covid-19 o a los que presentan un test de coronavirus negativo no es suficiente para reducir el número de infecciones.
«El test no protege de la infección», recalcó. Acotó que cualquiera que no esté vacunado y acuda a un evento o al trabajo con un test negativo puede infectarse allí, porque incluso las personas vacunadas pueden transmitir el virus.
Aunque la posible implementación de la norma 2G (vacunados y recuperados de covid-19) elimina la opción de las pruebas rápidas, tiene la desventaja de que los contactos se trasladarán al ámbito privado.
«La población debe entender claramente que en este momento la situación es muy grave. Estamos en una mala situación: tenemos 15 millones de personas que podrían haber sido vacunadas y que deberían haber sido vacunadas», señaló.
El reconocido virólogo subrayó que para salir de la pandemia es imprescindible cerrar las brechas de vacunación.