Berlín, 14 feb (dpa) – El ministro de Salud alemán, Jens Spahn, defendió las medidas más estrictas para el ingreso al país en las fronteras con la República Checa y Austria que se implementan desde hoy.
«Tenemos que darles a nuestros distritos en la región fronteriza la posibilidad de estar en calma», dijo en declaraciones que publica hoy el diario germano «Süddeutsche Zeitung».
El ministro de Salud explicó que creció a seis kilómetros de la frontera con los Países Bajos y que sabe valorar una Europa de fronteras abiertas. «Pero hay momentos en una pandemia en los que hay que tomar semejantes decisiones por la seguridad y la salud», añadió.
Tanto en la frontera con República Checa como con el estado federado austríaco de Tirol rigen desde hoy medidas más estrictas para el ingreso al país, debido a las variantes más contagiosas que allí se presentan.
En las zonas afectadas solamente pueden ingresar ciudadanos alemanes o extranjeros con residencia o permiso de estadía en Alemania. Existen excepciones para personal sanitario, conductores de camiones y trabajadores agrícolas de temporada.
Hasta el próximo martes, tanto Baviera como Sajonia decidirán sobre otras excepciones para otros grupos de trabajadores relevantes para el sistema.
Respecto de las críticas de la Comisión Europea a los controles limítrofes, Spahn consideró que es real que el libre tránsito de personas y mercancías es un «elemento constitutivo de la UE».
«Sin embargo, la lucha contra la aparición frecuente de mutaciones peligrosas en la frontera requiere ahora temporalmente esta drástica medida. Y el derecho de la UE prevé exactamente estas excepciones», argumentó.
Spahn destacó que se trata de abordar esta situación de manera constructiva. «Pero lamentablemente esta se salió de control en la República Checa, también en Eslovaquia y en el Tirol. Y debíamos reaccionar», sostuvo el ministro germano.