Viena, 25 ene (dpa) – Dos ex agentes de inteligencia de la policía austriaca y un ex parlamentario de extrema derecha han sido detenidos en el marco de las investigaciones por fraude contra el proveedor alemán de servicios de pago Wirecard, confirmó hoy la Fiscalía de Viena.
Los dos ex empleados de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución y Lucha contra el Terrorismo (BVT) y el ex político del Partido de la Libertad de Austria (FPÖ) Thomas Schellenbacher son sospechosos de haber ayudado al gerente de Wirecard, Jan Marsalek, a huir al extranjero para evadir la justicia alemana.
Schellenbacher ayudó a Marsalek a reservar un avión privado con destino a Bielorrusia, según declaró el abogado del político, Farid Rifaat, a la agencia de prensa austriaca APA.
Mientras que uno de los ex agentes fue puesto en libertad tras su detención, Schellenbacher sigue retenido, de acuerdo a la Fiscalía. No se ha tomado ninguna decisión sobre si el segundo ex agente deberá permanecer en prisión preventiva.
El ciudadano austriaco Marsalek desapareció en junio. Ese mismo mes, la empresa con sede en Múnich admitió un agujero de 1.900 millones de euros (unos 2.200 millones de dólares) en sus activos.
Las autoridades alemanas alegan que el director de operaciones de Wirecard, Marsalek, el presidente Markus Braun y otras personas habían obtenido fraudulentamente más de 3.000 millones de euros de bancos e inversores mediante la presentación de balances falsos.
Los fiscales alemanes también están investigando si los sospechosos desviaron grandes sumas de Wirecard. Según el fiscal general de Alemania, no se puede descartar que Marsalek haya actuado como fuente para la agencia de inteligencia austriaca.
La agencia de inteligencia de la policía austriaca se encarga de vigilar a los extremistas, incluidos los radicales de extrema derecha con vínculos con el FPÖ, los islamistas y los izquierdistas.
Las detenciones anunciadas hoy son las últimas de una serie de escándalos políticos y errores en los que está implicada la agencia de inteligencia.
Sus oficinas fueron allanadas por la policía en febrero de 2018 para descubrir supuestas actividades ilegales. La mayoría de los partidos políticos alegan que la redada fue un intento de Herbert Kickl, el entonces ministro del Interior, de socavar a la agencia.
El partido de Los Verdes, que forma parte de la coalición de gobierno con los conservadores del canciller Sebastian Kurz, dijo que las detenciones de Wirecard son una prueba más del enredo entre los oficiales de inteligencia, Wirecard, Marsalek y el Partido de la Libertad.
«Marsalek necesitaba, buscaba y encontraba políticos con poder y funcionarios con acceso a documentos clasificados», dijo el legislador verde David Stögmueller en un comunicado. «Marsalek gozaba de muy buenas relaciones con Rusia y la inteligencia rusa. ¿Cuál fue su papel en esto?», preguntó.
Por Albert Otti y Matthias Roeder (dpa)