Mönchengladbach (Alemania), 9 ene (dpa) – La victoria del Borussia Mönchengladbach frente al Bayern Múnich en la décima quinta jornada de la Bundesliga, en la noche del viernes, demostró que el retornado Jonas Hofmann es un revulsivo para el equipo y abre el camino para un regreso del club a la élite del fútbol alemán.
«Tenemos que aprovechar esto. Debe traernos coraje, fuerza, codicia», expresó un satisfecho Marco Rose, tras ver como sus jugadores remontaban un 2-0 adverso para acabar imponiéndose al todopoderoso Bayern por 3-2. Una derrota que, además, representa para el campeón alemán la número 26 frente al Gladbach, más que contra ningún otro equipo.
«El Gladbach confió en su juego de contragolpe», dijo el entrenador del Bayern, Hansi Flick, tras sufrir su cuarta derrota como técnico del club muniqués. Era la segunda vez que perdía contra el Gladbach en un clásico de la Bundesliga, como lo hizo en la derrota por 2-1 hace trece meses.
El protagonista del partido fue el internacional Jonas Hofmann, quien logró igualar el marcador con sus dos goles antes del descanso. Y su intervención fue decisiva en el gol de Florian Neuhaus, a los cuatro minutos de la segunda parte.
«Marcamos los goles tal y como habíamos previsto», destacó Hofmann, que se situó una y otra vez tras una vulnerable defensa del Bayern y fue tan importante para el cambio del Gladbach, como Flick temía. «Él es simplemente un factor importante para nosotros con su profundidad en el juego. Lo echamos de menos en diciembre», dijo Rose.
Después de que Hofmann sufriera un desgarro muscular en un muslo en noviembre, el equipo de Rose perdió muchos puntos innecesariamente. De seis partidos sin Hofmann, el Gladbach solo ganó uno.
Desde su vuelta, el equipo ha logrado ganar de nuevo. En su primer partido de Bundesliga tras la lesión, el Gladbach ganó 1-0 en Bielefeld hace una semana. Hofmann asistió a Breel Embolo en el gol de la victoria.
También el capitán Lars Stindl destacó en el partido. Neuhaus, que marcó el gol de la victoria, elogió dos pases sobresalientes de Stindl, que ha estado en plena forma durante semanas, antes de los dos goles de Hofmann. Para el capitán, lo más importante era «lograr por fin una victoria, aunque ajustada, contra un oponente tan importante».
En vista de los muchos puntos que se dejó el Gladbach, la victoria contra el Bayern fue muy importante. «Este es un partido y un resultado que debe darnos impulso», concluyó Rose.
Con 24 puntos en 15 partidos, y con dos victorias en el inicio del nuevo año, el Gladbach vuelve a aspirar a situarse en posiciones de clasificación para competiciones europeas.