Essen (Alemania), 14 feb (dpa) – La caída de los precios del acero provocó un descenso de los beneficios en el primer trimestre del gigante industrial alemán Thyssenkrupp, revelan datos de la empresa dados a conocer hoy en la central en Essen.
Thyssenkrupp informó que registró un beneficio neto de 98 millones de euros (105 millones de dólares) en el primer trimestre de 2022/2023, frente a los 122 millones de euros del año anterior.
Tras deducir los intereses minoritarios, el beneficio neto del trimestre fue de 75 millones de euros, frente a los 106 millones de 12 meses antes. El beneficio por acción bajó de 0,17 euros hace un año a 0,12 euros.
El EBIT ajustado también descendió a 254 millones de euros frente a los 378 millones de 12 meses antes.
Por su parte, las ventas igualaron el nivel del año anterior (9.000 millones de euros), mientras que la entrada de pedidos (9.200 millones de euros) fue inferior a la de hace un año (10.400 millones de euros).
La empresa confirmó sus perspectivas para el ejercicio fiscal 2023. Thyssenkrupp sigue esperando que su beneficio neto alcance al menos el punto de equilibrio y que el EBIT ajustado disminuya a un valor de entre tres y cuatro dígitos de millones de euros, en comparación con los 2.100 millones de euros del año pasado.
«A pesar de que el entorno sigue siendo incierto, los resultados del primer trimestre son sólidos», declaró el director financiero de Thyssenkrupp, Klaus Keysberg. «Estamos haciendo todo lo posible para alcanzar nuestro objetivo de flujo de caja en el ejercicio en curso».