(EP) – El comandante de las fuerzas rusas en Ucrania, Sergei Surovikin, ha reconocido este martes que la situación en lo que Moscú denomina «zona de la operación militar especial» es «tensa».
De acuerdo con Surovikin, las tropas ucranianas no cejan en su empeño de «atacar las posiciones de las tropas rusas», especialmente en puntos como Kupiansk, en Járkov, y Mikolaiv.
«El enemigo es un régimen criminal que empuja a los ciudadanos de Ucrania a la muerte. Los ucranianos y nosotros somos un solo pueblo y queremos una cosa: que Ucrania sea un Estado amigo de Rusia e independiente de Occidente y de la OTAN», ha dicho Surovikin.
Según ha relatado el alto mando militar, las Fuerzas Armadas ucranianas están desplazando ahora todos sus efectivos hacia la línea del frente, si bien ha incidido en que estas tropas no están lo suficientemente preparadas.
«Estas son fuerzas de defensa territorial que no han completado un curso completo de entrenamiento. De hecho, los líderes ucranianos los condenan a la destrucción (…) Para evitar la fuga de la línea del frente, las autoridades ucranianas utilizan destacamentos de nacionalistas que disparan contra cualquiera que intente abandonar el campo de batalla», ha zanjado.
Surovikin, quien es además jefe de las Fuerzas Aeroespaciales, ha informado de que, desde el inicio de la guerra, Rusia ha puesto a volar aviones no tripulados en más de 8.000 ocasiones y que estos drones han destruido más de 600 objetivos militares ucranianos.