Fráncfort/Washington, 17 oct (dpa) – La número dos del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, pronosticó que la crisis energética seguirá afectando a Alemania a largo plazo y que el invierno del 2023 puede ser incluso peor que el de 2022.
«Este invierno será difícil, pero el invierno de 2023 podría ser aún peor», dijo la subdirectora del FMI en declaraciones publicadas hoy por el periódico «Handelsblatt».
«La crisis energética no desaparecerá de forma tan rápida, los precios de la energía seguirán siendo altos durante mucho tiempo. Alemania debe reaccionar ante esto. La expansión de las energías renovables debe acelerarse significativamente», añadió.
En su última previsión económica, el FMI calculó un descenso del 0,3 por ciento en la producción económica de la mayor economía europea en 2023.
«Alemania tiene un sector industrial más grande que otros países. Y estas empresas ya tuvieron que luchar con los problemas en las cadenas de suministro durante la pandemia, y ahora el rápido aumento del coste de la energía se suma a ello», explicó Gopinath.
«Alemania es un país industrializado y, en consecuencia, está sintiendo estos impactos de forma particularmente aguda en este momento», opinó.
Pese a los efectos de la crisis, Gopinath consideró correctos los esfuerzos del ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, por cumplir de nuevo con el llamado freno de la deuda y limitar el gasto público.
«Sí, creo que el planteamiento del ministro de Finanzas es correcto», dijo. Añadió que debe hacerse todo lo posible «para bajar la inflación».
La número dos del FMI valoró medidas como la subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), pero consideró que la política fiscal también debe colaborar. «Por lo tanto, nuestro consejo es que se abstengan de aplicar una política fiscal expansiva», manifestó.